El reloj forma parte de nuestra vida cotidiana porque cada día hay cosas que hacemos a una determinada hora.
Me parece un buen aprendizaje para los niños cuando empiezan a poner interés. Además de iniciarse en la medida del tiempo, que les enseñará matemáticas, conceptos más abstractos (como ahora, antes y después) y les permitirá organizarse en sus tareas.
Seguramente que para aprender las horas no haga falta un reloj especial, creo que yo no tuve ninguno... pero a mí me parece muy útil.
Hay familias que usan un reloj de pared, de los grandes, que incluso se puede descolgar y poner sobre la mesa para hacer ejercicios con él. Pero como en casa somos amigos de aprender tocando, pues creo que un reloj de juguete va mejor al principio.
Así es que no me lo pensé nada cuando vi el reloj de madera de la foto del inicio, que además es un puzzle. Y como encima su precio era estupendo, ¡pues genial! ¡a la bolsa!
Pero... ya estaba en casa abierto y usado cuando me di cuenta de un detalle, que de haberme fijado mejor seguramente no lo había comprado: Las "cositas" que sirven para agarrar cada pieza del puzzle están pegadas justo encima de los números, dificultando que los más pequeños puedan reconocerlos bien.
El reloj lo podemos usar de todas formas, aunque ahora pienso que hubiera sido mejor sin ser puzzle, o al menos sin esas piezas clavadas en medio. Pero ya que lo tenemos lo aprovecharemos lo mejor que podamos.
¿Os ha pasado alguna vez comprar una cosa y daros cuenta tarde de algún fallo?
También el que ha diseñado el puzzle se ha quedado a gusto!
ResponderEliminarSí, y yo por no darme cuenta... en fin. Menos mal que fue baratito.
EliminarEl puzzle que tenemos nosotros (por cierto no ha tenido mucho interes en aprender las horas) si coloca como van pero es dificil enseñar el concepto de que luego es las 13,14,..... imagino que de ahi viene la falta de interes.
ResponderEliminarBueno al grano jeje el nuestro no tiene donde agarrar por lo que el puzzle se usa bien. Y si muchas veces he comprado algo y digo para que si tengo algo parecido, como las gomas para geoplano....luego no localice ninguno al final por agotado y por olvido...vamos un desastre jeje.
Besos linda y felicidades que a B quiera aprenderlas.
Nosotros es que en casa no nombramos las horas en plan 13, 14..., a partir de las 12 volvemos a decir la 1. Supongo que más adelante tendremos que comenzar con el concepto de 24 horas y entonces habrá que empezar con los relojes digitales.
EliminarBesos
Yo tengo un reloj parecido que me entró en una de las cajitas de Nonabox que también es puzle, pero tiene un espacio entre los números para que el niño meta el dedo y saque la pieza.
ResponderEliminarSe me ocurre que puedes quitar la pieza y dejarlo tal cual...
Lo he pensado, pero es que las piezas no están pintadas sino que llevan un papel pegado encima y tengo miedo que al intentar despegar el pivote ese se arranque el papel.
EliminarTal vez puedas arreglarlo... se me ocurre:
ResponderEliminar☆ Quitar los agarres, pintar la pieza y ponerle el número.
☆ Dejar los agarres, pintar la pieza y poner el número mas pequeño y en otro lugar.
☆ Dejar los agarres, pintar la pieza y poner el número en la parte de atrás de la pieza, para que gire la pieza y vea el número y coloque la pieza en su lugar. También podría ser de ayuda dibujar el número en su lugar, en la base del reloj.
☆ Pintar todas las piezas de colores fríos / calidos y jugar a colocarlas. Comprar otro reloj.
Jijiji... besotes Maribel!!!
Comprar otro reloj... jiji
EliminarBueno la opción de dibujar los números en la base me gusta, lo voy a intentar.
Si quito los agarres tengo miedo de estropearlo, como le he dicho más arriba a MisMellis. Aunque puedo quitar los agarres y usar las piezas por detrás.
Lo malo es que las piezas quedan muy juntas y si no hay agarres es muy difícil quitarlas.
Podría directamente tirar todas las piezas, jeje, pero es que las 12 y las 6 están fijas en el tablero.
Bueno, pensaré en todas las alternativas que me das y a ver cuál nos cuadra.
Besos
Lo de comprar cosas que luego te defraudan me pasa de vez en cuando, especialmente con libros. Cuando los veo de oferta, allá que me llevo media estantería y, claro, luego te encuentras con que están mal escritos o, peor aún, son incoherentes. El libro de 4 páginas en el que a uno de los protagomistas le cambian el nombre a la mitad es el colmo de la falta de continuidad.
ResponderEliminarUy, eso de cambiar el nombre a un protagonista no me ha pasado nunca, jeje.
EliminarEs verdad que cuando vemos cosas a muy buen precio a veces no miramos nada más y luego vienen las sorpresas.
Menos mal que la pérdida no ha sido mucha.
Chicas, sé que varias de vosotras habéis dejado comentarios, pero no sé por qué no están... Supongo que blogger habrá fallado por algún sitio...
ResponderEliminarHola Maribel, pues sí, yo fui uno de los comentarios, jeje. No recuerdo exactamente que puse, si que te comenté si sería posible pintar sobre el soporte en varios colores (madera y el de la letra y perfilar con un rotulador negro de tinta permanente) para que no se notara y se viera mejor el número. Otra solución sería que del 1 al 9 los pintaras en el rinconcito ese que hace forma redonda. Los restantes no hay sitio para ello, pero al ser dos cifras, el pivotito está en medio de las dos y no da tantos problemas de lectura como en los otros números.
ResponderEliminarTambién te comenté que alguna vez tenemos fallos de compra, normalmente me suelo mirar mucho las cosas y repensarlas, pero así y todo no sería la primera vez que al llegar a casa te das cuenta de algo que no has reparado en la tienda.
Nosotros en casa tenemos un problema con las horas y con Terremoto. El reloj de la sala que es circular y grandote, tiene los números romanos y para más inri van dando la vuelta a la esfera, así que entre que lo que lee allí son I, II, III, IV... y encima dando la vuelta, ni te cuento el empreño que tiene el niño con ese reloj... Es que la culpa es nuestra, siempre le ponemos las cosas dificiles. Ahora en serio, cuando busque el reloj intenté encontrar uno con la numeración normal, pero ninguno era del tipo que necesitabamos ni de las dimensiones que queremos, porque la sala es muy grande y alargada y queríamos uno grandote para que se viera de todos sitios, así que tuvo que ser con numeración romana.
Gracias por comentar otra vez Laura. Recuerdo tu comentario y el de Lidia, y no sé si alguno más... No sé qué pudo pasar.
EliminarLo que me cuentas del reloj con números romanos, supongo que en algún momento tendrá su utilidad práctica si es que en el colegio se siguen dando los números romanos. Será una buena ocasión para practicar.
O quizá comprarles un reloj más pequeño para su dormitorio, yo lo he pensado para B más adelante.
Besos
En su cuarto tiene un reloj, bueno, un despertador y con ese no hay problema. El problema lo tengo para que entienda que aunque allí vea otro símbolo ese símbolo se corresponde con el número que él tiene en ese lugar en el suyo. Vamos que si ve un 1 entiende que es la una, pero cuando tiene que asimilar que 1 = I no lo entiende o se monta un lio. Supongo que es un problema más en el difícil aprendizaje de Terremoto. Por ejemplo, también le despista mucho los relojes que no tienen números, sólo puntos, los tipo reloj de muñeca. Pero aún es peor los relojes que tienen cuatro números 12, 3, 6, 9 y luego puntos, porque eso de que desaparezcan los otros números de enmedio le desconcierta aunque tú le expliques que se sustituyen por puntos o rayitas. Vamos que lo de las horas, sin entrar en los relojes digitales, puede ser muy complicado para un niño cuando tiene necesidades educativas especiales. Besitos. Por cierto, hoy acaba el Ramadán, ¿no? ya nos contarás que tal os ha ido este mes tan especial. Hasta pronto y feliz Edit (se escribe algo así, ¿no?)
EliminarCasi, casi... es "eid" o "aid".
EliminarNosotros en Marruecos todavía estamos en Ramadan, hoy es el último día, pero en España ya terminaron ayer y hoy están en la fista. Ya sabes que todo depende de la luna.
Lo que me dices de Terremoto no lo había pensado, pero es cierto que para él es más difícil asumir que una misma cosa se puede representar de tantas formas diferentes.
Aunque a algunos adultos también les pasa, o nos pasa, con algunas cosas, jeje
No tengo claros recuerdos de esta etapa del aprendizaje de la lectura de la hora.
ResponderEliminarCuando A era pequeño, seguramente lo hicimos de una forma natural porque en catalán todavía és más complicado: "Tres quarts i mig de deu = tres cuartos y medio de diez" son las once menos diez minutos y así suma y sigue.
Ahora, después de veinte años, me alegro no habernos preocupado porque son pocos los jóvenes que utilizan reloj, llevan el teléfono móvil en sus bolsillos y la lectura es de la hora mayoritariamente es digital.
Jugad con los números, con los relojes, con las agujas pero no os preocupeis porque cuando vuestr@s peques sean mayores quién sabe cómo seran sus relojes... ¡tal vez telepáticos! ja,ja,ja.
Besitos
Carme
je,je, ¡Qué buen consejo Carme!
EliminarSupongo que tienes razón, cuando ellos sientan la necesidad pondrán interés en aprenderlo igual que nosotras aprendimos sin ningún juguete especial, al menos yo.
Y es cierto que los formatos van cambiando, aunque todavía quedamos las más clásicas que seguimos con las agujas.
Quizá para más adelante sería interesante mostrar distintas formas de medir el tiempo: reloj de arena, reloj de sol...
Besos
quê poca inteligencia a la hora de hacer un juguete para aprender los nûmeros de horas...
ResponderEliminarY qué poca vista la mía... jeje
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