Aprendizaje respetuoso como parte de la crianza

miércoles, 28 de enero de 2015

Qué hacer con el material infantil que ya no usamos

Fuente

Una mudanza es la perfecta ocasión para deshacernos de todas aquellas cosas que ya no usamos y que guardamos por si acaso, porque es un recuerdo, porque me da pena tirarlo... y que al final acaban haciendo torre en alguna parte de nuestra casa y, seamos realistas, nunca vamos a usar.
Si encima vamos a irnos a una vivienda más pequeña, entonces ya no queda otra.
Pero tampoco es necesario mudarse para hacer una buena limpieza de trastos varios, sólo hay que tener ganas y hacer el esfuerzo de proponérselo.

Me ha resulatdo muy ameno leer un librito que se llama "Mudanza Minimalista" (y que podéis descargar gratis aquí), de Valentina Thörner. Y sintiéndome inspirada, me puse primero con mis cosas y después pasé a las cosas de B.
Lo primero que decidí que ya no necesitábamos fueron los juguetes de cuando era más pequeño, que llevaban ya montón de tiempo sin ser usados. Me pareció buena la idea de regalarlos a un primo más pequeño, pero pensé que era muy feo llevármelos a escondidas y a ver qué le contaba luego cuando se diese cuenta de que no estaban. Eso nunca, quise ser madre sincera y le pregunté qué le parecía regalarle a A esas piezas de construcción con las que hacía tanto tiempo que él no jugaba... "¿Quéeeeeeee?" Se puso a construir cosas enseguida, pero la emoción le duró sólo esa tarde. Veremos cómo lo hacemos.

Las cosas que guardo de B y que realmente no se usan son esos juguetes que os cuento y el material educativo que también es de edades anteriores, además de libros de actividades y cuadernos acabados que he almacenado sólo de recuerdo. En algún sitio de la página de Valentina he leído la propuesta de hacer fotos de aquellas cosas que guardamos porque son recuerdos y desprendernos de la cosa en sí, me parece muy buena idea ¿y a vosotras?

Bueno, vamos con los consejos.
Hacemos tres montones y clasificamos las cosas en: "lo vendo", "lo regalo" y "lo tiro".

"Lo vendo"
Una vez vi a una niña vendiendo sus juguetes. Montó un tenderete en la puerta de su casa (vigilada desde la ventana por su madre) y vendía cada cosa a 1 euro.
Puede ser una buena idea para que los peques se saquen unas moneditas y que luego pueden gastar en algún juguete nuevo.
Otro tipo de material lo podemos vender por internet en las páginas que hay para ello.

"Lo regalo"
Sólo si los niños están de acuerdo.
Yo puedo recordarle a B cuáles de sus juguetes vienen de sus primos más mayores, así seguro que lo ve de otra forma y no le parece algo malo que esas preciadas posesiones vayan pasando de mano en mano.
También nosotras tenemos que entender que hay cosas que aunque se les hayan quedado pequeñas tienen un valor sentimental grande para ellos, si no son muchas y caben en casa sin demasiado trastorno... ¿por qué no ceder?
Si no tenéis a quien regalarlo, siempre podéis sortearlo en el blog...

"Lo tiro"
¡Uy! Esto quizá es lo que más nos cuesta porque si quisiéramos tirarlo ya lo habríamos hecho...
Vamos a tirar sólo lo que no le sirve a nadie, en nuestro caso serían esos cuadernos y fichas acabadas.
Aquí volvemos a la propuesta de hacer fotos de los recuerdos que queremos guardar y de las cosas físicas nos quedamos con muy poquitas elegidas cuidadosamente (si me pongo a guardar todos sus escritos desde los 5 años hasta que deje de estudiar, ya me puedo preparar un cuarto sólo para eso).

Finalmente, las cosas de B han cabido en una sola caja (grandecita, pero sólo una).

¿Guardáis muchas cosas de vuestros hijos? ¿Qué hacéis con las que ya no usan?

**********

16 comentarios:

  1. Los juguetes de bebé los regalé a la guardería donde estuvo Tsunami. Los de bebé de Terremoto los llevé a un centro donde recogian objetos para gente necesitada, los arreglaban y los vendían. Había unas chicas que me pidieron si se podían quedar con unos cuantos, me contaron que vivían en una casa muy grande cinco famílias juntas y que en total había quince niños. Eran emigrantes, esa chica era brasileña. Unos pequeños estaban con ellas. Me dieron pena al ver la cara de alegría de los pequeños que estaban allí. Así que volví a casa que no estaba demasiado lejos y cogí más juguetes y ropa y objetos que ya no usaba de Terremoto y se los llevé. Fue digamos un detonante para desprenderme de eso que siempre nos cuesta. Tendrías que ver lo contanta que estuvieron y me aseguraron que los pequeños harían fiesta esa noche. Las chicas me insistieron en si no me quería quedar con algo por si tenía otro hijo. Yo entonces aún no conocía al padre de Tsunami y así como estaba Terremoto tampoco pensaba volver a ser madre de nuevo y les dije que no.
    En otra ocasión queríamos que Terremoto hiciera limpieza de su cuarto. El quería montar el puesto en la calle como has contado. Influencia de ver los dibujos de los Pato Aventuras y los mercadillos particulares de los americanos. Hacer eso al menos en Palma y delante de casa no está bien visto y creo que las ordenanzas municipales no estarían de acuerdo con los sobrinitos del pato Donald. Así que lo que hicimos R y yo fue que montara el mercadillo en casa y le fuimos comprando les juguetes. Nos pasamos un buen rato jugando y regateando con él. Terremoto consiguió algo de dinero para su hucha y nosotros quitamos de enmedio un buen montón de juguetes. Algunos de ellos los tengo guardados para cuando Tsunami sea más mayor y otros los regalé. Terremoto no se quejó de los que hicimos con ellos porque como le dije, tu me los has vendido ahora son de mamá y ella puede hacer con ellos lo que juzgue más oportuno. No se si esta idea te puede servir con B.
    Actualmente todo lo que me sobra de Tsunami se lo paso a una amiga mia que tiene un peque un año más pequeño y que tiene un par de primas con niños también más pequeños. Cuando le paso algo quedan en casa de su madre y se reparten el botín, jaja.
    Besitos.

    ResponderEliminar
  2. Ayyy! mi gran pendiente: una estantería tan ordenada como la de la foto. Me cuesta deshacerme de las cosas que aprecio y tengo facilidad para encariñarme con las cosas, así que acumulo y tengo cada vez menos espacio... además tenemos en vistas una mudanza ¡creo que voy a pasarlo fatal!. Me bajaré ese libro a ver si me ilumina un poco aunque yo más que mínimal soy barroca :)
    Un besote

    ResponderEliminar
  3. La idea de hacer fotos me parece genial. de hecho yo lo hago, peeeero... Soy incapaz de tirar nada. De vez en cuando noto que mi marido se ha desecho de una u otra obra de arte infantil y me enfado muchísimo. Mi casa parece el museo de Daniel e Iván jajaja Pero es que a mí me encanta tener las paredes y estanterías decoradas con sus logros diarios.
    En cuanto a los juguetes, ahí no me porto del todo bien. Lo normal es que los regalemos directamente sin decirles nada. Lo cierto es que los míos ni se enteran de que les falta. El otro día regalamos una caballito de peluche enorme con ruedas para que puedan montarlo los niños pequeños y correr por lo pasillos ¡y ni se han dado cuenta de que ya no está!

    Raúl también vende cosas por internet. Sólo las que están en buen estado y por muy poco dinero. Así está que las vende enseguida.

    Y tiramos sólo lo que está roto y ya no tiene uso. ¡Y tiene que estar realmente destrozado! Porque aquí le encontramos el uso a todo en un periquete. Mi pobre marido nos llama acumuladores de basura jajaja

    Gracias por el post

    ResponderEliminar
  4. uyuy... Maribel. Leo esta entrada en un momento delicado como madre que intenta complementar el cole con actividades en casa. Tras ver que en las últimas semanas, mi hijo es reacio a hacer ya actividades (siempre jugando), me he planteado tirar todo el material que había preparado y que tanto tiempo me ha quitado... Ha sido un arrebato y tengo que reflexionar más sobre este tema. Pero me parece una idea genial hacer fotos o escanear trabajos para guardarlos. Una gran idea!!
    Me alegro muchísimo de que hayas vuelto a escribir!! Nos aportas muchísimas ideas, y nos haces reflexionar. Enhorabuena por este blog!!
    Me gustaría hacerte una consulta personal, pero no he encontrado un mail de contacto. Si es posible, podrías decírmelo, por favor?
    Gracias por compartir tus experiencias.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  5. jajaja, nosotros en la mudanza nos pasô un poco igual, para llevar las cosas a la guarderîa municipal en principio querîa quedarse con todo! pero bueno, el dîa de llevarlos estaba sûper contenta y un poco igual que con la ropa, dice: le vamos a dar a ninyos que no tienen? aunque yo he guardado algunos juguetes a los que tenîa màs carinyo, creo que le harà ilu tenerlos cuando crezca...

    ResponderEliminar
  6. Así es . Como no nos mudamos a menudo ,yo tengo por norma que cuando comienza el año me entra un totumrevolutum de limpiar y recoger y tirar . Así qué es mi momento para ver las cosas que llevan ese año guardadas sin moverse . Con la ropa tengo varias opciones : las mejores las regalo a una familia nigeriana que conozco ,las peores ( que son pocas ) al contenedor de reciclaje . Con los juguetes no hay problemas , mis hijos están acostumbrados a regalar los que no usen desde pequeños ,así que cuando viajamos a países necesitados ,llevamos juguetes chulos que funcionen claro . También solemos regalarlos al hospital de aquí , y cosas como gorras, llaveros y pequeños juguetes lo damos al laboratorio de extracción de sangre donde pinchan a los niños para que los regalen ellas a los niños . Se ponen muy contentas cada vez que vamos y es que mi niño pequeño se pincha allí desde pequeño cada cierto tiempo y son muy cariñosas con él. En fin, que hay que hacer hueco porque sino no entramos en casa,pero siempre intentando buscar otra oportunidad y uso a las cosas porque que no las usemos nosotros no quiere decir que no tengan un posible uso . ¡Me encantaría poder hacer un mercadillo! Esto lo extraño mucho de mi vida en USA.

    ResponderEliminar
  7. Como tú dices, es complicado "gestionar" el qué hacer con todas las cosas que acumulamos en casa y que, realmente, ya no utilizamos.El año pasado hice dos mudanzas, y pude comprobar que es muchísimo el material guardado (de cualquier tipo) que no necesitamos en nuestra vida diaria. Personalmente, doy muchísimas cosas que ya no utilizo (o tiro, si veo que ya no están en buen estado). No me gusta almacenar porque siento que dichas cosas "se comen" nuestro espacio "vital"...
    Un abrazo!

    ResponderEliminar
  8. Pues nosotros todos los años acudimos a un mercadillo benéfico de intercambio de juguetes, libros, ropa... Asì nos desprendemos de lo que no usamos y nos traemos algún juguete para la peque. Es un manera de reciclar y de dar una segunda vida a lo que no precisas y adquirir algo que te viene bien sin comprar.

    Feliz dìa!

    ResponderEliminar
  9. Ay que has tocado un tema que a mi me cuesta horrores!!!
    me cuesta en general muchísimo desprenderme de las cosas y encima si son de mis hijos.
    Hace poco sí que hice una limpieza porque con niños en edad de secundaria no era plan de seguir guardando según qué juegos. La mayoría los vendí a precios muy bajos, algunos los regalé y nada de nada tiré, no soy capaz, lo que no sabía qué hacer con ello o lo regalé o sino incluso lo volví a guardar hasta encontrar un dueño algún día que sí lo apreciará.
    Lo que sí tiro de vez en cuando son ciertos trabajillos y papelitos. Pero de estos en mi casa hay muy pocos porque no solemos hacer "bussywork" (lo que se llama hacer algo por hacer algo). Si escriben algo lo hacen en su libreta de cuentos o escritos varios y esta no la tiro ni en broma. De dibujos igual, tienen una libreta de dibujos y de trabajos tengo todos sus lapbooks guardados.
    pero bueno, algún papelito o cuadernillo alguna vez he tirado y entonces va al contenedor de reciclaje jejeje.

    Por otro lado yo guardo cosas para mis nietos. Lo reconozco, apa, lo he dicho... en público. Sí, guardo cosas para mis nietos. Si no tengo nietos, pues no sé, ya me buscaré unos nietos adoptivos para darselo supongo, pero hay juguetes que no sé tirar o regalar como duplos, legos, animales de plástico de calidad etc... y algunos juegos de mesa que ahora ya no juegan pero que espero jugar con mis nietos jajaja. Y los Playmobils aún juego yo jajaja.

    Tengo suerte de tener un sótano y no he hecho una mudanza en los últimos 14 años. El día que me toca..... pues ya veremos jajaja.

    Además también me educaron así desde pequeña en el "guardalo por si acaso". Creo que también tiene algo que ver con la sociedad consumista. Ahora estamos mucho en una sociedad de "regalalo o tiralo y así podrás comprar otra cosa nueva". Lo de "regalalo o tiralo" está muy bien, pero si viene la parte de "para comprar algo nuevo" detrás, ya no me gusta tanto.

    Yo tengo el armario llenísimo de ropa. La gran mayoría que me la han regalado y me ha llegado de varios sitios. He comprado poquísima ropa en mi vida. Tengo cosas que no me las he puesto nunca, pero alguien me las dio y pensé, bueno, no está mal, quizás para alguna ocasión. Y no, no la tiro porque también me ha pasado muchas veces que paso por una tienda de ropa, veo algo que me gustaría y pienso: bueno, para qué comprarlo, si tengo ropa de sobras y más de la que me puedo poner......
    Y así no la compro.
    Creo también que hay mucha gente que vacía su armario de ropa (me la pasan a mi, que ya me está bien jajajaja) pero al año siguiente está su armario de ropa igual o peor que el mío porque se han comprado un montón de cosas nuevas y venga, otra vez a vaciarla.... y así no paran de tirar y comprar.
    Esta es la parte que a mi no me gusta de algunos consejos de "quítate las cosas de encima".
    Y con los juguetes de los niños pasa lo mismo. Está bien que se desprenden de cosas, pero no tanto cuando es para volver a llenarlo todo con cosas nuevas. Creo que esto es un error en el que caen algunos con la teoría del "desprendimiento", y caen más en el círculo de: lo antiguo no vale ya y necesito cada vez cosas nuevas. Tiro para tener espacio para nuevas cosas, vendo para comprar......

    La idea debería de ser: me desprendo de cosas, pero tampoco me voy a comprar nuevos jajaja y esta última parte cuesta más.
    Yo para no caer en la tentación, guardo y así no tengo sitio para nuevas cosas jajajaja!!!

    Una vez leí un libro "menos es más" y cuando tenía que leer que era mejor vender mi yate para poder estar más tranquila y no tener que preocuparme por él.... pensé.... no sé.... creo que este libro no es para mi jajjajaja.

    ResponderEliminar
  10. Hola Maribel, qué alegría que estés por aquí. Yo acabo de volver después de un año, aun no sé si mi blog ya está disponible para acceder a el, acabo de darlo de alta como público. Igual necesita un tiempo. Pero estoy de vuelta!!!
    Tirarlo nunca, salvo que no sirva!! siempre encontramos uso, bien nosotros o los pasamos en herencia, niños necesitados, etc...creo que siempre hay alguien que puede usarlo (si está medianamente usable, claro)
    Nos leemos, un beso

    ResponderEliminar
  11. Hola: yo al principio lo guardaba pero realmente con el tiempo no lo volvían a utilizar. Si tienes problemas de espacio ya es mucho más difícil guardarlo todo. Selecciona lo que te pueda servir para otras actividades a corto plazo. Seguimos en contacto

    ResponderEliminar
  12. Ufff, a mi de pequeña mi madre me inculcaba el donarlo, siempre se Doñana a asociaciones que pedían (hablo sobre todo de juguetes y cuentos). En una ocasión me dijo de dárselo a una prima mas pequeña y no me gustó la idea, pero me acabó convenciendo de que era igual que dárselo a otros niños, que tal... Pero jamás se repitió. La siguiente vez que fui a casa de esa prima tenía todos mis anteriores juguetes destrozados, literalmente, no jugaba con ellos, los pisoteaba y rompía, los pintaba (por ejemplo las muñecas con bolígrafo) y no era por edad. Lloré muchísimo, mis juguetes yo los cuidé durante años y estaban como nuevos y en un par de días no servían ni de basura, también me enfadé, conmigo, con mi madre y con mi prima y su madre (por no enseñarla a jugar bien como mi madre a mi). Yo no tendría mas de 7 años pero recuerdo esa rabia como si fuera ayer. Le pedí a mi madre que jamás volviesemos a darle nada a esa familia, que prefería darlo a desconocidos porque así yo no me enfadaría al no ver si los rompían o no. Y así lo hicimos durante muchos años mas. Te cuento todo este rollo para que pienses y hables con B las posibles consecuencias de darlo a un familiar, como verlo luego y que fuera su juguete, pero ya no, y no le dejen jugar con el, o lo usen de distinta forma. Vosotros lo estáis haciendo muy bien y seguro no tendréis el "incidente" que yo pasé, pero quizás sirva a otros que vengan por aquí.

    ResponderEliminar
  13. Me encanta la foto cómo están organizados los juguetes. Yo ahora soy mamá supongo que pasaré por ahí de no saber que hacer con los juguetes.
    Me quedo por aquí, te invito a pasarte por mi blog, y si quieres te quedes también. Besitos

    http://hermanasdehambre.blogspot.com.es/

    ResponderEliminar
  14. Voy a leer ese librito o porque a nosotros nos pasa...con las cosas de H y con las nuestras,y aunque de vez en cuando lo hacemos por temor a entrar en sindrome Diogenes tambien cuesta porque tiene que ser en su momento ,es decir hacer limpiezas de este tipo requieren un estado mental y psicologico determinado, no?
    Gracias.

    ResponderEliminar
  15. Assalamualaikum wa rahmatullahi wa barakatuhu
    Me ha gustado tu entrada, porque realmente me siento identificada. Solemos guardar tantos recuerdos y futuros usos, que se acumulan muchísimas cosas, y el problema aumenta cuando no hay un hijo único, además de una misma evidentemente. Al final no queda más remedio que buscar ese hueco para ponerse manos a la obra y no esperar a esa mudanza. Me voy a descargar ese libro y leerlo in shaa Allah, besos.

    ResponderEliminar

Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...